El próximo 17 de junio cerraré una etapa con FECE, federación de la que llevo siendo parte activa desde enero de 2015. Cualquier final de etapa es un momento de reflexión y evaluación, de mirar hacia atrás pero también hacia delante y seguir apostando por el futuro.
Llevo toda una vida dedicada a la actividad comercial y directiva centrada en la distribución de proximidad y siento que ha sido un orgullo haber podido desarrollar toda mi carrera en este sector, desde mis comienzos como comercial en ELECTROFIL, llegando hasta la Presidencia y Dirección General de UMESA, posteriormente la aventura de desarrollar ECOSIG y finalmente el reto de defender y representar a todo el sector desde la Secretaría General de FECE. Tengo la sensación de que todo el aprendizaje que he adquirido a lo largo de mi carrera, gracias a haber estado rodeado de excelentes profesionales, ha podido ser puesto al servicio del sector en esta última etapa, de la que destacaría el desarrollo intensivo de la colaboración institucional y con todos los actores implicados en el ámbito del comercio de proximidad de electrodomésticos para poder apostar por el futuro de las tiendas de cercanía.
Debo decir que dejo a FECE en muy buenas manos, tanto por quien me sustituirá el 17 de junio como por los profesionales que me han acompañado estos últimos 4 años. Reconozco y agradezco el apoyo recibido desde la Junta Directiva de FECE y sus Presidentes. De cara a la elección del nuevo Secretario General, Carlos Moreno-Figueroa, considero que es un gran profesional, de total confianza con quien he colaborado activamente en la transición. Él es el candidato ideal para seguir luchando por el comercio de proximidad en el sector de los electrodomésticos al frente de FECE.
Desde FECE somos unos firmes defensores de la tienda de proximidad, que consideramos de total relevancia de cara a conservar un tejido saludable y útil para el comercio de nuestras ciudades. Y por ello me alegra observar todos los hitos que en estos años FECE ha conseguido en materia de RAEE, transformación digital de los establecimientos y adaptación del pequeño comercio a una normativa que no siempre ha sido benevolente con él, entre otros muchos retos.
Pero soy consciente también de todo lo que queda por hacer y en ese sentido me siento tranquilo porque estoy seguro que la federación queda en manos de los mejores profesionales.
Agradecido por la oportunidad que se me ha brindado en este tiempo de luchar por las cosas en las que creo y a las que he dedicado toda mi trayectoria profesional, y también por la confianza que se ha depositado en mí, solo me queda desearles lo mejor a las nuevas generaciones.